Sinopsis:
Cal (Steve Carell) y Emily (Julianne Moore) llevan 25 años casados, pero
ahora su matrimonio llega a su fin. Entonces, Cal empieza a frecuentar
un bar de copas en el que conoce a un metrosexual llamado Jacob (Ryan
Gosling), el cual decidirá ayudarle para que deje de ser un fracasado y
se convierta en un galán. Pero, en ese momento, Jacob conoce a Hanna
(Emma Stone) y se enamora perdidamente de ella, sin saber como actuar y
pidiéndole ayuda a Cal.
Crítica:
me esperaba una peliculita, una comedieta romanticona, y es lo que es,
pero, porque siempre hay un pero, he de decir que es genial, esta muy
bien llevada, muy bien hilada, no llega a ser una comedia de enredo por
muy poco, tiene muchos toques de humor, pero sobresalen los toque
humanos, y que decir de los actores, si ya los adoro a todos de antes,
me encanta Steve Carrell tiene ese algo cómico que no le hace falta
hablar y ese toque triste con el que te puedes identificar, adoro a
Julianne Moore, pienso que es de las mejores actrices que hay
actualmente, amo profundamente a Emma Stone y ese toque picaro/inocenton
y Ryan Gosling que de nuevo (tras Drive) ha conseguido con otro papel
que quiera ser él, en cuanto al crio y la canguro son un encanto, los
adoptaría a ambos, y si eso fuera poco sale Marisa Tomei haciendo un
papelón, y Kevin Bacon que no podía faltar, para poder odiar a alguién.
Como ya digo me esperaba un peliculita sin pretensiones, pero he de
admitir que me ha encantado.
Nota: 6.5/10
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